Portafoli
divendres, 21 de juny del 2013
dimecres, 19 de juny del 2013
La planta baja: una intersección entre el edificio y la ciudad
Reflexión extraída de la revista DPA, nº 21, Cota Zero.
La planta baja es el espacio que define el punto de
contacto entre el edificio y el entorno urbano que le rodea.
Entendemos un edificio residencial mediante su planta
tipo, sus leyes de composición o de la estructura, como la lógica vertical del
edificio, un sistema que se podría repetir indefinidamente en vertical pero que
se ha de transformar al contactar con el plano horizontal del suelo.
De aquí derivan los cambios de uso que se producen en la
planta baja, los programas comerciales o las actividades colectivas, sin
olvidarnos del papel del vehículo, que suele ser difícil de relacionar con el
edificio.
Un aspecto muy importante que atañe a los edificios
residenciales es la transición del espacio exterior al interior o privado. Algunos
de los mecanismos de aproximación con los que se puede abordar son la
percepción lejana del acceso, los cambios de cota o los espacios intermedios.
En el Pabellón
Suizo de Le Corbusier en París,
el espacio continuo en planta baja hace que se relacionen el entramado
estructural de pequeña dimensión de las plantas superiores con seis únicos
“pilotis” que soportan el edificio, permiten la continuidad del terreno y se
convierten en elementos protagonistas del espacio.
El espacio generado es un lugar dinámico de paso y al
mismo tiempo es un lugar para estar, pudiéndose utilizar como prolongación del
vestíbulo. Lo trata como si de una estancia más se tratase, ya que sobre el pavimento
aparecen dibujados elementos de mobiliario, y mediante los límites del
pavimento se enfatiza el acceso o se recoge la llegada de los pilares.
El proyecto de viviendas de Alvar Aalto en Berlín, en el
barrio de Hansaviertel. El edificio se organiza mediante dos núcleos de
viviendas unidas por un espacio que, en primer lugar, mejora las condiciones de
la parte posterior haciéndola más permeable al exterior. La flexión resultante
de la conexión acentúa el carácter principal de la fachada oeste, que acoge al
visitante al mismo tiempo que facilita la disposición resguardada a Sur en una
de las esquinas de las grandes terrazas que tiene cada vivienda.
Al acercarse al edificio se percibe la planta baja libre
algo elevada del suelo. Este desnivel otorga mayor privacidad a las viviendas
situadas en este nivel y acentúa el recorrido hacia el acceso mediante la
rampa.
El vestíbulo se abre
al exterior por dos de sus lados y a través de los otros dos se accede a los
núcleos de comunicación. Su forma y dimensión es debida a que corresponde al
espacio que ocupan las dos viviendas centrales de las plantas superiores. Se
establece una clara jerarquización de la entrada principal mediante una rampa y
la entrada secundaria que se bifurca en dos aprovechando la topografía del
lugar.
A diferencia del
Pabellón de Le Corbusier, la planta baja del edificio de Aalto es claramente un
lugar de paso y su pavimento de adoquines en continuidad con el exterior nos lo
indica explícitamente.
Al estar en un
lateral la rampa, obliga al visitante a tener una visión en escorzo del alzado
Sur, que permite entender la disposición de las terrazas.
Actualmente hay un
desinterés de nuestra sociedad por lo público, hay un abandono de aquello colectivo,
y por consecuencia, una desconsideración por parte de los arquitectos hacia
factores como los que se tratan con seriedad en los anteriores proyectos.
Las cuestiones
derivadas de la relación entre el edificio y el terreno son muchas veces
ignoradas. Para establecer una complicidad con el lugar habrá que tener una
actitud que querer atender a las cuestiones que derivan del contacto con el
suelo.
dimecres, 5 de juny del 2013
dissabte, 1 de juny del 2013
CONFERENCIA “LA EXPERIENCIA EUROPAN” _ Mª J. Aranguren y J. G. Gallegos
· Vivienda pública en Bentaberri, San Sebastián
En este edificio centran su investigación en el espacio interior, su renovación y su actualización.
“Arquitectura y
vivienda: cubo al cual se le abren puertas y ventanas” Le Corbusier.
En base a esta idea
conceptual del cubo, quieren determinar qué escala es la de su vivir,
dimensionar el espacio en función a la escala humana.
El proyecto se sitúa en una manzana dividida en dos lados
largos (vivienda tubo con separaciones a través de mobiliario) y dos cortos
(viviendas dúplex).
Las viviendas tienen asoleamiento en todas las horas del
día, aprovechándose de estar aisladas de la ciudad, y con una apertura visual
hacia el mar.
En la vivienda tubo, los elementos que compartimentan el
espacio interior pueden desaparecer durante el día. Las viviendas son estancias
de 50, 70 y 90 m2 ,
y este espacio continuo que hay de fachada a fachada se subdivide en cocina y
tres baños.
La vivienda tipo consta de tres dormitorios, a la que se
le puede añadir el módulo de la escalera para obtener cuatro habitaciones o
quitarle medio tubo para la de dos habitaciones.
La casa se conforma por tres espacios alargados con luz,
separados por dos espinas funcionales, fraccionables por puertas correderas de 1,20 m . Por los falsos
techos encima de estas espinas transcurre toda la electrificación y fontanería.
“Las cosas de la casa no cambian, sí cambia la manera de
colocarlas” Mies van der Rohe.
Por eso los módulos de muebles son fácilmente
montables y desmontables, por lo que la vivienda se puede compartimentar de
diferente manera.
· Europan 1. Madrid.
En este proyecto se centran en investigar la imagen de la vivienda y su incidencia en la ciudad.
Se trata de ubicar una serie de torres frente a la
autopista, por lo que piensan que la percepción de velocidad es importante. Al
final, el proyecto encargado consta de dos torres frente a la M-40.
Las dos torres son iguales, pero al colocarse giradas una
respecto a la otra, mediante la translación de las torres respecto al
basamento, y al tener los cuatro alzados diferentes entre sí, se produce el
efecto de que las torres son diferentes.
Los nueve módulos reticulares que se ven en fachada son
las viviendas en dúplex, mientras que en el otro sector se colocan las
viviendas desarrolladas en una planta.
Se llevan al exterior los ascensores, y la escalera es el
elemento lineal que divide en dos partes asimétricas el volumen.
Un aspecto de gran interés del proyecto es el hecho de
recuperar valencias perdidas en las agrupaciones de viviendas como es la
existencia de un espacio vecinal, cuya referencia histórica pudieran ser las
corralas madrileñas.
La gran franja oscura que se ve desde el exterior, es el
núcleo central de comunicaciones verticales del edificio, con el desarrollo de
corredores que pretenden un mayor contacto entre los habitantes de la torre.
dilluns, 13 de maig del 2013
dimecres, 1 de maig del 2013
dimecres, 13 de març del 2013
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